La Región de Murcia se echó en la tarde de ayer a defender lo más preciado que hay en esta pequeña tierra del sureste español, el Mar Menor. Sin embargo, fueron varios dirigentes de los municipios ribereños los que no acudieron a defender con sus habitantes este preciado ecosistema. Unos dirigentes que cegados por las siglas de un partido político repiten los mantras dictados por sus jefes desde el Palacio de San Esteban y la Sede de Génova. Tal es su ceguera que alguno de estos alcaldes ha tachado a todos los asistentes a la manifestación de ayer de lobbies, cuando entre estos ciudadanos se encontraban votantes de su partido.
Para más inri, ninguno de ellos se dejó ver ayer por las calles de la capital murciana pues como buenos borregos han de seguir fielmente las directrices de su pastor. Un pastor, que cada vez se ve más acorralado ante la falta de excusas que poner a la ciudadanía murciana. Tan necios son de que no ven la importancia que tiene la conservación del Mar Menor para sus tan preciados intereses económicos, pues quien va a acudir a dos municipios que no tienen más atractivo turístico que la albufera salada. Por tanto, resulta chocante que alcalde y alcaldesa de San Javier y San Pedro del Pinatar no hayan acudido a esta exitosa manifestación por el Mar Menor.
Ahora aludirán a la instrumentalización que han hecho algunos partidos de esta protesta, mientras ellos han cumplido a rajatabla los dictámenes de unas organizaciones y asociaciones medioambientales que les importan un pito. Sin embargo, llevan a rajatabla una instrumentalización de los símbolos patrios y nadie se ha quejado por ello. Así que, búsquense otra excusa. La de la apertura de la Gola de Marchamalo y la inacción del Gobierno del Estado están un poco agotadas.
Pero no fueron los únicos que no asistieron ayer a dicha manifestación. Tampoco acudió ningún cargo de la tan apreciada Cofradía de Pescadores de San Pedro del Pinatar. Una institución que se ha vendido por 30 monedas de plata y que únicamente se dedican a dictar las proclamas de sus dueños. En definitiva, abandonen su sectarismo y defiendas los intereses tanto de los habitantes de sus municipios como de los diferentes pueblos de la región, ya que un Mar Menor vivo será beneficioso tanto para sus luchas partidistas como para el conjunto de la Región de Murcia.
#SosMarMenor
